El invierno es época de recogimiento, de charlar junto a un
buen fuego, de evaluar, de proyectar... Pero la actividad de la
huerta no para, así que también es tiempo de preparar el terreno
para las siembras y plantaciones de primavera. Tiempo de comenzar
un nuevo ciclo: abonar, sembrar, cuidar, cosechar, celebrar...
Ciclos que nos mantienen unidas a las más de 40 familias que
formamos este grupo de producción y consumo, no solo entre
nosotras, sino con la madre tierra. Una buena madre que nos
acoge, nos alimenta, nos sirve de referente, nos ama...
Es tiempo de mostrarle gratitud conservando su fertilidad, y para
ello qué mejor que darle lo que más le gusta: mierda. Mierda
buena, mierda ecológica, mierda km. 0.
Mierda potente, mierda de palomas locales, mierda de gallinas
felices.
Tierra fértil, lombrices gordas... plantas sanas, cosecha
abundante, alimentación de calidad...
Gente feliz.
(ver todas las fotos del Sábado Marrón del 15/02/2014 en
este
enlace)
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